NotCo y los lecheros, una historia conocida
ANDRÉS MEIROVICH Managing Director Genesis Ventures
- T+
- T-
Andrés Meirovich
Hace un par de semanas, la demanda de los lecheros a la empresa NotCo por el uso de la palabra “leche” en el envase de esta última tomó las portadas de los medios en Chile.
Sin lugar a duda esta es una nueva muestra de que cuando el incumbente se siente amenazado, prefiere “atacar” antes que colaborar. ¿No debiese ser motivo de gran orgullo que una empresa local sea líder de su categoría en Chile, algunos países de Latinoamérica y entrando con extremada fuerza a retailers de la talla de Whole Foods en Estados Unidos? ¿No debiesen los lecheros haber apostado por la innovación hace años en vez de atacar a NotCo? ¿No podría ellos (los lecheros) haber creado algo similar teniendo en cuenta el auge de la comida saludable que viene desde ya varios años?
En la cultura local se innova una vez que se está con el agua hasta el cuello. El último reporte de Wayra con el IESE de España muestra a Chile en un lugar muy decepcionante en la innovación corporativa. Mercados poco profundos, colusión en el pasado y directores/gerentes “old fashion”. Un estudio de McKinsey sobre Corporate Venture Capital muestra que la innovación corporativa exitosa debe involucrar un fuerte compromiso de socios, directores y gerentes, que debe ser al menos un compromiso de 12 años, que debe ir de arriba hacia abajo (invirtiendo en etapas más adelantadas de las startups, no en las iniciales), deben ser inversionistas que lideran las rondas de financiamiento y típicamente cuentan internamente con ejecutivos con experiencia relevante en Venture Capital e innovación. ¿Cuántos de esos ejemplos se ven actualmente en nuestro país? Seguramente Copec y un par más. ¿El resto en que está? La mayoría ni siquiera ha partido, otros muy perdidos con “hackatones” o ejercicios de innovación abierta poco productivos.
Competencia, competencia, competencia. Innovación, innovación, innovación.
La experiencia de Estados Unidos, Israel, Singapur y UK deben servirnos como modelos a seguir en este ámbito. También los ejemplos latinos como Mercado Libre, Nubank entre otros. Llegaron y conquistaron mercados cómodos y poco desafiados.
Si en las discusiones constituyentes o parlamentarias no se pone como prioridad desarrollar un mercado que privilegie la competencia (y castigue al que no lo hace), es decir pro-mercado y no pro-empresa, seguiremos perdiendo competitividad versus otros actores latinoamericanos y globales que se están acercando a nuestro país.
La empresa es una institución fundamental para el crecimiento y desarrollo de un país, que aporta felicidad, paz social, igualdad de oportunidades. Más para un país como Chile, alejado de los centros mundiales de consumo.
Ojalá no tengamos otros ejemplos en el futuro del estilo NotCo-lecheros, sino mucha colaboración entre empresa/industrias consolidadas y nuevos entrantes. Sino puede pasar lo que dice el dicho “Camarón que se duerme, se lo lleva la corriente”.